Tanto si es verano como invierno, la protección solar debe acompañarte siempre (la facial y la corporal). El simple acto de aplicarnos nuestra crema, aceite o loción solar garantiza una piel luminosa y homogénea a lo largo de los años, evitando los signos de la edad, la aparición de manchas y el cáncer de piel, entre otros. El protector solar resulta indispensable, por eso es necesario escoger el que mejor se adapte a nuestro tipo de piel.

 

¿De qué hablamos cuando hablamos de protección solar?

Como bien sabrás, los rayos ultravioletas (UV): UVA + UVB, pueden llegar a ser muy perjudiciales para nuestra piel. De hecho, la luz UVB es la principal causa de quemaduras por el sol y los rayos UVA son reconocidos por su poder penetrador. Además, estos últimos se asocian a las arrugas, la pérdida de elasticidad y otros efectos del fotoenvejecimiento.

 

La mayoría de filtros solares (FPS) bloquean el impacto de los rayos UVB. Así es como funcionan: un FPS 30 bloquea el 97% de los rayos y un FPS 50 el 99%. Parece que no hay mucha diferencia entre ellos, ¿verdad?. Aun así, en realidad cada décima cuenta y marca la diferencia, sobre todo en casos de mucha sensibilidad a la luz o la piel o antecedentes de cáncer de piel.

 

Además del porcentaje de protección, es importante recordar que ningún FPS, independientemente de su capacidad, continúa siendo eficaz si no se aplica cada dos horas, y que el enrojecimiento de la piel es una reacción ante los rayos UVB, pero no desvela el impacto que la piel ha sufrido de los rayos UVA.

 

¿Quién debe usar FPS protección solar?

¡Toda persona a partir de los 6 meses de edad todos los días! Incluso si eres de los que trabajan a cubierto todo el día y sólo estás expuesto a la radiación un período corto de tiempo, debes usarlo de igual forma y tener presente que la mayoría de las ventanas no bloquean los rayos UVA.

 

¿Qué tipo de FPS/protección solar usar?

La FPS que usemos variará según la cantidad de exposición solar que tengamos y nuestro tipo de piel. En todo caso, siempre tendremos que usar un filtro que ofrezca protección contra los rayos UVA y UVB.

 

Algunas cremas, lociones para después del afeitado y humectantes contienen fotoprotección solar suficiente para que podamos realizar tranquilamente las actividades de nuestro día a día. Sin embargo, si pasas mucho tiempo en exteriores, tu piel necesitará FPS de mayor protección y resistente al agua, como el que se usa en la playa. Los “resistentes” o “muy resistentes al agua” también son buenos para los días calurosos o si salimos a hacer deporte. Es recomendable no usarlos para el uso cotidiano, ya que acostumbran a ser pegajosos y no se adaptan bien al maquillaje.

 

¿Cuánta cantidad de FPS usar?

¿Sabías que la mayoría de la gente sólo se aplica la mitad o una cuarta parte de lo que se tendría que aplicar de FPS? Es necesario aplicar siempre una onza, es decir, unos 30ml de FPS. Así pues, durante todo un día en la playa, sería necesario usar la mitad de un cuarto de botella de 250ml. También hay que tener en cuenta que los filtros solares deben aplicarse 30 minutos antes de la exposición solar para que la piel los absorba y que es fundamental volver a aplicarlos en cantidades iguales a la primera aplicación cada dos horas e inmediatamente después de nadar o sudar y secarse con la toalla.

 

Los mitos más extendidos sobre el uso de los FPS:

Como en muchos de los campos de la salud, el mundo del cuidado de la piel está repleto de falsas creencias que tomamos por ciertas, muchas veces por desconocimiento e influencia de nuestro entorno. ¡Estos son los más representativos y que seguro que más de una vez habrás escuchado!

 

  • Usar FPS puede causar una deficiencia de vitamina D

No hay estudios que demuestren que aplicar protector solar dificulte la absorción de la vitamina D. Asimismo, la vitamina D la encontramos en suplementos alimenticios y alimentos como el salmón, los huevos, la leche, el zumo de naranja…

 

  • No hace falta usar FPS si hace frío o el cielo está nublado

Hasta el 40% de la radiación ultravioleta llega a la tierra en los días nublados. Esta percepción errónea ha propiciado y sigue propiciando quemaduras, ya que mucha gente no usa protección contra el sol los días nublados o fríos.

 

  • El 80% de la exposición solar sucede durante la niñez, por lo que ahora es demasiado tarde para remediarlo

Esta es una interpretación errónea. Se ha demostrado que recibimos menos del 25% del total de nuestra exposición a los 18 años. De hecho, a medida que nos hacemos mayores, tienden a aumentar las horas de exposición al sol, ya que pasamos más tiempo al aire libre.

 

Por último, recuerda: cuando compres FPS revisa los ingredientes y el tipo de protección que ofrece, asegúrate si está indicado para el uso diario o para el uso al aire libre y busca si tiene el Sello de Recomendación de The Skin Cancer Foundation, garantía de que el FPS cumple con los más altos estándares de calidad, seguridad y eficacia.

 

¿Te quedan dudas sobre el uso de los FPS? ¿Te gustaría saber qué tipo de protector te iría mejor? ¡Contacta con nosotr@s!

Pin It on Pinterest

× +34 663 433 914